Mis representaciones iniciales han cambiado al abordar este contenido, porque para adquirir nuevos conocimientos debo de romper con las representaciones anteriores, es un ajuste mental de lo conocido y los conocimientos nuevos adquiridos.
Mis concepciones de enseñar historia estaban dirigidas al aprendizaje en concreto del tema, que los alumnos conocieran que había ocurrido y como era en ese momento la situación, mas no me adentraba a los motivos que incitaron todos esos acontecimientos, porque eran tan relevantes, que beneficios se obtuvieron, la situación – problema eso implica reflexionar e ir mas allá de lo que se ve.
Anteriormente mi función se limitaba a mostrar y transmitir la información mientras que ahora somos los creadores de esas guías de reflexión para poder generar un conocimiento más profundo.
Pero para poder modificar mi forma de enseñar primero tuve que conocer lo que implica enseñar a través de la situación- problema, que debo de prever una situación, anticipar las representaciones posibles que se pueden hacer del tema, elaborar una situación que implique la reflexión del alumno, y proveer de los materiales necesarios que generaran ese aprendizaje.
La enseñanza a través de la situación – problema requiere de una organización detallada, aunque es mas tardada genera un aprendizaje más amplio del acontecimiento, porque conlleva la reflexión y el análisis de cada una de las razones o motivos que influyeron en ellos. Implica la intervención de varias disciplinas que fortalecen y aumentan los saberes.
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